Contra el sectarismo y por la unidad de la izquierda
Se llevó a cabo en la ciudad de Luján, la presentación de la lista del Movimiento Socialista de los Trabajadores (MST), que participará de la primaria del 12 de septiembre en el Frente de Izquierda y de los Trabajadores Unidad (FIT U), contando con la presencia, además de los candidatos locales, del pre candidato a diputado nacional por la provincia Alejandro Bodart. Desarrollaron un acto en la Plaza Colón, en el que Bodart hizo uso de la palabra, para luego ir a una conferencia de prensa con los representantes de los distintos medios de prensa locales y regionales que se hicieron presentes. El MST evidentemente le incorpora agitación al funcionamiento del Frente, que aglutina a la mayoría de las expresiones partidarias de la izquierda en el país, y que en algunas provincias ya le disputan abiertamente el protagonismo político a las fuerzas tradicionales. Cuestionan el funcionamiento del agrupamiento unificador, planteando en un lenguaje directo que hay que dejar las posturas meramente testimoniales para ser prácticos y buscar mayores apoyos para ir a disputar el poder. Bodart reseñó la importancia de que en el último tiempo la izquierda contara con presencia de legisladores, tanto a nivel nacional como provincial, que plantearan claramente las posiciones entre los diputados, buscando sumar en esta elección a los Concejos Deliberantes, y de ahí la importancia que ellos le dan a la presentación de los candidatos locales de cada uno de los lugares que le toca estar presente. Hizo puntualmente una referencia a la novedad que el FIT U vaya a internas y que esto se hará «entre compañeros», con muchos acuerdos en lo programático, pero que se empezó a discutir como el Frente se amplíe lo más posible y se transforme en una alternativa real, no sólo en lo legislativo, sino en unos años, en una alternativa de gobierno. Bodart señaló que hay «olas de cambio» en toda Latinoamérica, se están cayendo las viejas estructuras, y está surgiendo una izquierda que está empezando a llegar al poder, con sus contradicciones y su idiosincracia particular. Y como se están viendo estos fenómenos en Chile, en Colombia, en Perú, y que nuestro país no es la excepción y la izquierda va a ir progresando. «Vamos tener un buen resultado, pese a que intentan fortalecer una alternativa de ultraderecha, para que ocupe el tercer lugar; esto ya lo hicieron en la presidencial, y no lo lograron. La izquierda estuvo por encima de los libertarios. La izquierda tiene solución para los problemas graves que estamos teniendo, y por eso estamos creciendo. «En el movimiento social, en el movimiento sindical, porque hay mucha gente que está cansada de los dinosaurios que están en los gremios hace 30, 40 años, y ellos son ricos mientras los trabajadores son pobres, en el movimiento ambiental porque en todos los municipios, prima la ganancia sobre el medio ambiente, estamos creciendo por abajo y empezamos a crecer en lo electoral. Nosotros queremos mejorar cosas de la izquierda, porque consideramos que si mejoramos, rápidamente podemos crecer aún más».
«Uno es sacarnos ciertos elementos de sectarismo que tenemos, como aquella que tenemos con los compañeros de la otra lista con eso de que «acá solo estamos los buenos, y no es así». Porque nosotros somos una porción de trabajadores y de sectores populares pero hay mucha gente, incluso hay quienes tienen muchas ideas similares a nosotros, pero que está por fuera de los partidos de izquierda, pero que activa en el movimiento social. Incluso hay gente que debería estar acá y está en la casa equivocada, por ejemplo en el Frente de Todos y perciben que no se están dando los cambios que se necesitan. Entendemos que es necesaria una izquierda que se abra para recibir, para enamorar a toda esta gente que vota por el mal menor, no muy convencida, y que se decepciona de los gobiernos. Nosotros creemos en una izquierda moderna que este a tono con los tiempos que correen. Y también vemos mucho personalismo, y si los candidatos son siempre los mismos, y no es una izquierda plural, que refleje distintos matices, no va. Nadie quiere ir detrás de otro. Lo que tienen que haber es rotación, y hay compañeros que tienen dos mandatos tienen que ir por un tercero o cuarto. No nos parece correcto. Nosotros creemos que después de dos mandatos, tienen que volver a trabajar de algo. No se le puede poner barreras a la gente. A los adoradores de la biblia del marxismo les decimos que defendemos la incorporación de aquellos que luchan por un mundo mejor. Tenemos que ser una fuerza movimientista de mayorías. Y que agrupemos a todos los que están cansados de las fuerzas que nos han traído hasta acá». Luego Bodart hizo referencia a lo ocurrido en Jujuy, en las recientes elecciones provinciales, en las que el FIT U tuvo un papel destacado, mostrándolo como ejemplo elocuente del crecimiento electoral al que hacía referencia, en particular en la ciudad de Palpalá, donde se encuentra la firma Altos Hornos Zapla, de la industria siderúrgica, donde se obtuvo el primer lugar, lo que abre una interesante expectativa de acá a dos años, como para ser gobierno distrital. Aludió explícitamente a los intereses que sus posiciones toca, según lo manifiesta, y cómo no quieren el 1% rico y el 99% pobre, y como los medios de prensa tradicionales no cubren su trabajo de militancia o siquiera entrevistarlos, precisamente porque defienden en muchos casos precisamente a esos intereses. Y que para que los ricos no sean cada vez más ricos, es que son imprescindibles los impuestos progresivos , lo que inevitablemente generaría mayor equidad. La necesaria investigación de la deuda externa. Síntesis Digital le consultó que piensa con respecto a que cierto sector de la izquierda juzga con dureza el hecho que el MST apoyara las posiciones expresadas por Fernando «Pino» Solanas, a lo que Bodart manifestó que precisamente ese tipo de cuestiones son a las que aludía cuando hacía referencia al sectarismo con el que algunos juzgan las posiciones que en algún momento sustentaron, como reconocerle a Solanas que enfrentó valientemente al menemato, que le costó incluso un atentado, y que tanto ayudara con sus películas a poner temas candentes en debate, como el de la deuda, el «fracking», los trenes, la megaminería, lo ambiental, «Rompe con la estructura del PJ y se acerca a la izquierda. ¿Y cual es la actitud que tienen que tener la izquierda? ¿De expulsarlo o abrirle las puertas para ser algo grande? Por sectarismo de algunos sectores, Pino seguramente dudó y volvió a donde no debería haber vuelto. Y se desaprovechó seguramente una oportunidad de incorporar su valioso bagaje intelectual y enriquecer así las experiencias de los sectores que buscan el cambio».